Programa 23: Manolita Chen, memoria histórica viva

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En el programa de esta semana hablamos con Manolita Chen y Jorge Pérez, presidenta y vicepresidente de la Fundación Manolita Chen. Ambos nos presentarán la casa de acogida para personas LGTBI+ en riesgo de exclusión que recientemente ha abierto esta fundación en Arcos de la Frontera.

Memoria Histórica LGTBI+: la Chen de Arcos

Artista, empresaria de éxito, reconocida por ser la primera mujer trans a la que se le aprobó el cambio de nombre y sexo en su DNI y también la primera mujer trans a la que se le reconoció el derecho de adopción en 1985.

A las puertas de celebrar el próximo domingo 20 de noviembre el Día Internacional de la Memoria Trans, recibimos esta semana a una mujer que es memoria viva de nuestra comunidad: Manuela Saborido Muñoz: Manolita Chen.

Jorge Pérez, vicepresidente de la Fundación Manolita Chen y presidente de la Asociación Pasaje Begoña, reconoce que “no hay una sola Manolita” y manifiesta que “desde la Fundacióne stamos potenciando no solo la Manolita activista, también queremos dar a conocer su faceta como madre, vedette y coleccionista de arte”.

Durante su intervención, Pérez recordó que se encontró, de casualidad, con “una entrevista de José María Íñigo, a Manolita, del año 1984. Ya entonces, la “Chen de Arcos” manifestaba que quería tener una fundación desde la que ayudar a otras personas”.

40 años después, y gracias a la Asociación Pasaje Begoña y el equipo de investigadores/as y colaboradores/as de esta entidad, Manolita ve cumplido su sueño. El principal proyecto de la Fundación Manolita Chen, que ella misma preside, es la creación de la casa de acogida para personas LGTBI+ que se encuentran en riesgo de exclusión social. Se trata de un proyecto que ya ha visto la luz en Arcos de la Frontera, localidad natal de Manolita, y que ya acoge a personas que, entre otras circunstancias, han sido expulsadas de sus casas por ser LGTBI+. Próximamente, la fundación abrirá dos nuevas casas de acogida en Sevilla y Huelva.

Testigo de excepción del Pasaje Begoña de Torremolinos

Manolita, cariñosa y cercana, recordó en el programa “Somos de Colores” cómo fue su infancia en Arcos de la Frontera y sus triunfos como vedette en París, Roma, Berlín, San Francisco o Las Vegas: “tras mucho esfuerzo –recordó Manolita–, conseguí mi sueño de infancia: bajar con lentejuelas, plumas, boas y mucho brillo por las escaleras de un escenario. No podía creer que hubiera llegado a actuar en París, en el Moulin Rouge. Yo, una mujer de pueblo que no tuvo colegio”.

La artista, también fue testigo de excepción del Pasaje Begoña de Torremolinos, isla de libertad para las personas disidentes sexuales en los grises años del franquismo: “para mi, el Pasaje Begoña fue una cosa muy grande. Cuando llegué La Nogalera y vi cómo los hombre se contestaban unos a otros, se echaban los brazos por lo alto y las lesbianas, a las que se las veía peor que a los mariquitas, se daban besos… ¡no he visto cosa más maravillosa que aquella!“, rememora con alegría.

En cuanto a su casa de acogida, con emoción que este hogar “está abierto para los transexuales, para quienes están muriendo en la calle, en los coches… para quienes nadie los quiere aquí esta la casa de Manolita Chen”. Manolita ha cumplido 80 años. Pero su edad no es un impedimento para trabajar de sol a sol, y con salud de hierro, para su fundación y su casa de acogida: por esto sigo luchando. Por esto no esto cansada. Por esto seguiré luchando hasta que me muera. Y no voy a parar”.

El programa está disponible en iVoox, Spotify y las principales plataformas digitales.

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