Silvia (ella). Soy asturiana de la ciudad de Oviedo, tengo 25 años, soy una mujer trans y tengo un blog diario. Ahora empiezo una nueva aventura poniendo mi granito de arena con mi sección “El rincón de Silvia” en Somos de Colores, donde como siempre, hablare sin pelos en la lengua.
Esta señora se dedica a dar titulares en los que se rechaza a las mujeres transexuales. Es una de las feministas que no nos aceptan, aunque ella diga que no lo es por llevar una bandera de colores. Ser una mujer transfóba no es cuestión de llevar banderas, es cuestión de apoyar, no decir ciertas cosas y menos en público. Todo lo contrario a lo que esta señora se ha dedicado a hacer.
Su último titular es que las mujeres tienen útero, pero aquí hay una cuestión y es que hay mujeres cis que por lo que sea tampoco lo tienen. Ser una mujer trans y no tener útero no me hace ser menos mujer, soy igual de mujer que todas ellas.
Lo que realmente son son unas ridículas envidiosas, vamos a ser finas, que no tienen otra cosa mejor que hacer que atacarnos cuando, en lugar de eso, deberíamos estar unidas todas y luchar contra el machismo que viene pisando fuerte, sobre todo en los jóvenes.
Esos jóvenes que las montan cada fin de semana, violan, maltratan, matan, y que nadie se ha planteado tomar medidas en el congreso.
Me hierve la sangre al ver a las generaciones futuras haciendo lo que les da la gana, incluso se ríen de la policía. Pero eso no importa, importa atacarnos a nosotres ¿por ser diferentes? Todos y todas somos diferentes, ni un gemelo es idéntico al otro. Así que dejemos de odiarnos y unámonos para hacer un buen país.
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