Silvia (ella). Soy asturiana de la ciudad de Oviedo, tengo 25 años, soy una mujer trans y tengo un blog diario. Ahora empiezo una nueva aventura poniendo mi granito de arena con mi sección “El rincón de Silvia” en Somos de Colores, donde como siempre, hablare sin pelos en la lengua.
He tenido que volver a ingresar en el hospital en el área de psiquiatría debido a la depresión que me genera la disforia de género.
Es duro tener unos genitales que no te corresponden. Cuando más lo noto es a la hora de tener sexo con mi pareja, y eso que él pone de su parte para que yo me sienta cómoda y disfrute del sexo, pero me cuesta mucho. Las cosas, cuando no están en su sitio, hacen que la mente te juegue una mala pasada.
Pensé en terminar con todo. Fue aquí cuando me dije: “Silvia, necesitas ayuda”. Para mí fue un esfuerzo muy grande hacer las cosas bien, normalmente las hago como el culo, pero pensé en la gente que me quiere, me apoya y no se merecían que yo tomara esa decisión, así que decidí ir al hospital e ingresar.
En el ingreso descansé mucho y me dio tiempo para pensar en mi relación, y más que nunca quiero estar con él, no quiero dejarlo.
Me quiero casar y ser madre con él; ese es mi sueño y espero cumplirlo algún día.
Ahora estamos mejor que nunca, y eso que hace unos días tuvimos un problema que casi nos rompe. Pero bueno, hablando se entiende la gente y se arregló todo por suerte. No sé qué haría sin él ahora. Es mi pitufo gruñón, lo adoro. Y con mis amigos se lleva estupendamente.
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